(4 personas)
• 3 calabacines
• 2 cebollas
• 3 pimientos verdes de freír
• ½ kilo de tomate frito
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal
Se pelan los calabacines y la cebolla. Se parten junto con el pimiento en dados de un centímetro. Se fríen por separado en una sartén con aceite de oliva, se escurren y se reservan. Se mezclan todos los ingredientes en una cacerola y se añade un poco de sal. Se incorpora el tomate frito, se vuelve a mezclar, y se pone en el fuego durante tres minutos. Se retira, se deja reposar media hora y se mete en el frigorífico. Es preferible consumirlo un día después de su elaboración. Se sirve templado y se puede acompañar con patatas o huevos fritos.