(4 personas)
• 4 medallones de solomillo de ternera
• 4 lonchas de beicon
• ½ vaso de nata líquida
• Caldo de gallina
• 1 chorro de vino blanco
• Aceite de oliva virgen extra
• Mantequilla
• Sal
• Pimienta negra
• Patatas
• 4 cabezas de champiñón
• Espinacas
• Cebollas francesas
• Espárragos trigueros
En una sartén se incorporan dos cucharadas de aceite de oliva y una de mantequilla. Se salpimientan los medallones de solomillo y se rodean con una loncha de beicon sujetándola con una varilla. Cuando el aceite esté muy caliente se fríen vuelta y vuelta, se tapan y se dejan tres minutos a fuego lento. Se añade el vino, el caldo de gallina (ver pág. 90) y se raspa bien la base de la sartén para desprender la sustancia. Se deja hervir a fuego muy lento hasta reducir el caldo, incorporando finalmente la nata líquida. Se sirven con su salsa, acompañados de una guarnición compuesta por cebollas francesas, espárragos trigueros y champiñón relleno de espinacas.